Yo tenía 11 años, puedo decir hoy en día que no fui agredido, no fui maltratado ni amenazado para hacer lo que me hicieron esa tarde. No obstante, puedo decir que si fue una violación, que fui víctima de un violador.
Creo que mi historia es importante porque en la mayoría de casos las personas son amenazadas, obligadas o forzadas, no fue mi caso, pero no significa que no haya destrozado mi vida.
Era un amigo de la familia, un gran amigo de mi padre y mi madre, un hombre prestigioso en el barrio donde vivíamos, casado y con dos hijos. Yo solía ir a su casa porque su hijo era uno de mis mejores amigos, su padre tenía en su habitación películas de todo tipo, entre ellas películas infantiles. Cuando su padre no estaba con mi amigo veíamos películas y pasábamos unos buenos momentos.
Su padre siempre me invitaba a ver películas a su habitación, aunque casi siempre me invitaba para que viniera a ciertas horas o cuando el no trabajara porque quería ver las películas conmigo. Él me decía que también le gustaban y que no las había visto todas, yo tenía 11 años así que no veía nada extraño en esa situación.
Una tarde fui a su casa a buscar a mi amigo pero no estaba, entonces su padre me invito a ver una película a su habitación. Tenía caramelos y pizza, eran las 3 de la tarde y el local de su casa estaba abierto aun. Fui a la habitación corriendo por que quería ver la película y comer pizza, además este hombre era un gran amigo de mi familia.
Cuando el entro a la habitación cerró la puerta, puso la película y apago la luz; eso ya me asusto un poco. No sé cuánto tiempo paso desde que comenzó la película, cuando me di cuenta él estaba sin ropa sobre mí besándome y tocándome, yo me sentía muy mal en ese momento, me daba mucho asco lo que él me estaba haciendo. No entendía lo que estaba pasando y no sabía por qué el amigo de mi familia me hacía eso, yo le decía que me dejara ir, él estaba sobre mí y no me dejaba mover; él seguía tocándome y besándome y yo me sentía cada vez peor y más asustado. Yo no grite, no fui golpeado, pero todo lo que sucedió ese día marco mi vida por completo; La tortura fue psicologica, lo que me sucedio hizo perder mi confianza en las otras personas, a tener miedo aun en las tardes soleadas de verano. En mi caso no hizo falta una calle oscura y sin gente alrededor, no hizo falta agredirme ni llevarme a la fuerza. En mi caso siendo solo un niño de 11 años, solo hizo falta una película, una pizza y la confianza de un amigo de mi familia para destrozar mi vida por completo.
Nunca les dije nada a mis padres, primero porque no sabía que decirles, ni yo entendía lo que me había pasado; segundo, me daba mucho miedo que mi padre pudiera castigarme o pegarme por lo que me había pasado. Lo peor de esta situación es que él aun visitaba a mi familia y mis padres lo visitaban a él, en algunas ocasiones mis padre me enviaban a la casa de este hombre a buscar algún objeto, yo lo esperaba en la puerta y él siempre actuaba como si nada malo hubiera pasado, hasta me invitaba de nuevo a ver películas. Este hombre pensaba en su mente sádica que yo había disfrutado o que me había gustado. Él se mudó ya hace muchos años, aunque mis padres ya no lo ven ni se visitan por la distancia sé que aún son amigos, he escuchado a mis padres hablar alguna vez por teléfono con él; parece que le van las cosas muy bien, mientras mi padre habla con él yo pienso que mi historia no es única, imagino el inmenso daño que habrá causado a quien sabe cuántos otros niños.
¿Por qué no lo denuncie? No lo sé, no pienso en ello, no sé si es por vergüenza, miedo o porque simplemente no quiero saber nada de él ni recordar el pasado. Sé que si tuviera la oportunidad lo mataría, si tuviese una pistola o tuviera la oportunidad lo haría, pero no sé si diré alguna vez a alguien más acerca de esto.
Esta es la primera vez que lo hablo con alguien y lo hago porque es usted un profesional, y por qué aún tengo problemas en mis relaciones por culpa de esto. No le había prestado mucha atención porque me molesta pensar en esto, pero ya llevo 1 año con mi novia y siento que necesito ayuda psicológica para superar este problema; lo hago sinceramente por ella, porque la quiero. Las anteriores relaciones simplemente las deje para no enfrentarme a este problema pero no puedo seguir huyendo.
La importancia de este caso de violación y pedofilia se basa en los antecedentes a ella, en como en muchas ocasiones no es necesario obligar ni amenazar a la víctima, pues al ser un niño aun no tiene la capacidad mental de enfrentarse a una situación como esta. Como dijo la víctima, ni siquiera él sabía lo que estaba pasando, además el violador tendrá herramientas para manejar psicológicamente a la víctima. En este caso la pizza, las películas y sobre todo la confianza de ser un amigo de la familia fueron consideradas como las tres principales razones que llevaron al pequeño a esta situación.
Los profesionales no dudan siquiera por un momento en la culpabilidad del adulto en una situación parecida, pues ellos entienden que la mente de los niños es una mente sin maldad ni malicia. Los pequeños no prevén los riesgos ni los peligros en situaciones como estas, son fácilmente influenciables. En la mayoría de casos, el miedo a ser castigado por sus padres es razón suficiente para mantener en secreto lo sucedido, en casos como este, y en las propias palabras de la víctima: ”ni yo mismo sabía que decirle a mis padres, no entendía lo que me había pasado ni sabía por qué este hombre había hecho eso conmigo”.
Noviembre 2018
Foto: Kat J
