¿Qué es la vida y que es la muerte? ¿Por qué gastamos tanto esfuerzo en explicarla y no en vivirla?
Anónimo 1200 D.C
Ya Desde nuestro nacimiento estamos destinados a morir, una verdad inevitable que todos conocemos pero que no estamos dispuestos a enfrentar. Durante siglos la ciencia ha estado buscando la respuesta a esta pregunta. Evitar envejecer O hacernos vivir para siempre, un sueño hoy pero que podría convertirse en realidad en el futuro.
Quién tiene o ha tenido un ser querido pasando esta etapa entiende lo difícil que es tomar decisiones que parecen fácil pero que son emocionalmente difíciles. Quien tiene que decidir si desconectar a su padre o madre, aquel que tiene que decir adiós a su hijo con cáncer terminal o todo aquello que sufra directamente o indirectamente las dificultades del suicidio.
¿Vemos la llegada de muerte de la misma manera?
Esto depende de la edad, estado de salud o procesos vitales por los que esta pasando la persona afectada o sus familiares.
La perspectiva ante la muerte, en pacientes que han sido diagnosticados y presentan una enfermedad terminal, y el papel que tiene el sistema de atención médica en el último episodio de la vida del paciente va a moderar la visión inevitable de la muerte.
Además, se explorarán algunos de los dilemas bioéticos que la familia, los pacientes y la ciencia tiene que enfrentar al momento de decidir si terminar o no con la vida de otro ser humano.
Entre estos El aborto, la pena de muerte, la eutanasia, son los temas de mayor discusión con personas a favor y en contra.
No todas las personas quieren vivir, esto es una realidad y no todas las personas quieren morir. ¿Quién tiene derecho a quitarle la vida a otra persona? ¿O bajo que parámetros?
Hay países donde las leyes otorgan el derecho a matar, puede ser una persona o entidad quien decida si alguien puede morir en situaciones específicas de enfermedad, delitos, o ante un sufrimiento prolongado.
Los cuidados paliativos
Los cuidados paliativos se definen como el apoyo médico brindado a una persona que va a morir. En la mayoría de los casos, el paciente tiene una enfermedad terminal que ya no se puede curar, los cuidados paliativas pueden durar días, semanas o incluso años. Lo que se busca con esto es aliviar el dolor y el sufrimiento de la persona durante la última etapa de su vida.
¿Vale la pena invertir dinero en curar a una persona mayor?
Hay entidades y personas que Se plantean esta pregunta cuando la edad del paciente es la variable en la discusión, cuando una persona de 90 años está enferma y necesita operaciones difíciles, trasplantes o cuidados intensivos, la pregunta que surge es si vale la pena todo el esfuerzo y gastar recursos en alguien que, aunque tenga éxito en las intervenciones médicas morirá pronto de una manera o de otra. Por otro lado, están los que creen que al estar cerca de la muerte todos estos esfuerzos médicos y económicos podrían usarse para salvar a las personas más jóvenes.
La Respuesta a estos debates morales esta en cada persona y en los argumentos que pueda exponer.
En otros casos, el diagnóstico no existe, pero la persona quiere morir. Hay casos en los que alguien está dispuesto a poner fin a la vida. En casos psicológicos de depresión severa, ansiedad o cualquier otro trastorno mental, el sufrimiento día tras día sin nada que pueda aliviar ese sufrimiento o dolor pueden ser la causa de tomar la decisión de terminar con su vida. ¿Quién puede decidir aquí? ¿Qué se puede hacer para ayudar a la persona que sufre?
Los dilemas de la bioética son aquellos en los que decidir las reglas de la muerte dependerá del punto de vista de una entidad o grupo de personas. En la mayoría de los casos, la razón es subjetiva y es difícil encontrar el consenso y la aprobación de todas las partes involucradas.
Eutanasia
La etimología de la palabra eutanasia en griego Eu y Tantos "Bien muerte". Desde esta perspectiva, la muerte tiene que ser aceptada y se le puede dar a una persona dependiendo de ciertas circunstancias.
• Eutanasia pasiva: cuando un paciente es diagnosticado con una enfermedad terminal, y después de un consenso con la familia y las leyes, se retira todo el apoyo médico vital, lo que permite que la persona muera de forma natural y con el menor sufrimiento posible.
• La eutanasia activa: Bajo este enfoque, la muerte se le dará a una persona usando herramientas medicas o fármacos con la única intención de terminar su vida.Se aplica a personas en fase terminal que sufren intensos dolores o malestar, personas dependientes 100%, o la pena de muerte ante delitos o crímenes.
• Obstinación terapéutica: el uso excesivo de tratamientos médicos y cuidados de salud, sin que estos traigan verdaderos beneficios para el paciente. Al contrario, la obstinación terapéutica suele traer perjuicios por el exceso de medicamentos o tratamientos alargando la vida del cliente, pero con mayor sufrimiento y dolor.
• Suicidio asistido: por la voluntad de la persona afectada y el apoyo de la familia, las leyes aceptan y ayudan a terminar con la vida del paciente. Esto es muy similar a la eutanasia activa, la principal diferencia es que la persona es quien decide su destino.
El impacto que la bioética tiene en el cuidado de la salud está representado en las estrategias aplicadas, en los protocolos que la medicina usa en todos los casos relacionados con la muerte y en la adopción de medidas para mejorar este último episodio de la vida de las personas.
¿Al final, quien puede decidir nuestro destino? Tal vez no exista una respuesta unánime a esta pregunta, lo que nos lleva a reflexionar sobre la importancia de la muerte o de cómo aprovechar esta última etapa. ¿Disfrutar con nuestros seres queridos, cumplir nuestros sueños?
Enero 2020